Helado de plátano y moras




Ya lo sé, ya, que muchos piensan que soy tonta. Y es que me miran y sólo ven unos pechos desmesurados  y un cuerpo voluminoso que se mueve con singular parsimonia, como si nada me preocupase.

Reconozco que soy buena comedora y que me gusta picar a todas horas. Y una vez llena, estaréis conmigo en que no hay nada como tumbarse y contemplar las nubes, aunque nunca me he entretenido en contarlas porque enseguida me invade la modorra y no puedo evitar una siesta reparadora.

Sin embargo, esta mañana mi vida ha dado un giro sorprendente. Y es que allí, en medio del campo de raigrás, se han sentado  Panxito y  Don, y han comenzado a tocar un chotis de lo más alegre. Tan pronto como han sonado las primeras notas, mis amigas y yo hemos empezado a movernos al ritmo de la música y ya nada nos ha detenido.

Estoy convencida de que aquellos que piensan que soy boba, ahora dirán que encima hago el ridículo. Pero ¡qué más da!  Uno-dos-trees, un-dos-trees .... ¡Dejad paso a la reina del baile!




El último martes de julio fui invitada al Palau de la Música al acto Música, vacas y helados organizado por La Fageda, en el que Panxito y su hijo Juan nos deleitaron con la interpretación de varias piezas musicales.

Aunque  Panxito nos animó a salir y bailar al son de la música que escuchan las vacas mientras pastan, nadie se atrevió a hacerlo, seguramente porque la timidez nos hace ser a menudo menos lanzados de lo que quisiéramos.

En el acto se presentaron los helados de La Fageda, que están hechos de manera tradicional y con ingredientes naturales. No tienen colorantes ni conservantes.

A continuación, el equipo de Singularis nos preparó tres recetas con helados: Carpaccio de mango con helado de yogur y crujiente de chocolate, Sopa de melón cantalupo con helado de vainilla y nueces de macadamia, y Mil hojas de crema de coco con helado de chocolate y crujiente de pistacho.

Al finalizar, nos invitaron a una cata de los helados de La Fageda. No hace falta decir que pudimos repetir y probar diferentes variedades, ¡y todas nos parecieron excelentes!




Yo hoy quisiera traeros una receta de un helado diferente, de aquellos que se hacen sin productos lácteos y que son ideales para vegetarianos: Helado de plátano y moras.

Hay actualmente en el mercado una máquina que nos permite hacer en pocos minutos helados 100% naturales y que sólo utiliza fruta congelada en su elaboración.

¿Os ha llamado la atención este helado? Pues aún os gustará más cuando veáis lo poco que se tarda en hacerlo!

Empezamos pelando los plátanos congelados. Para hacerlo más fácilmente, los ponemos previamente unos segundos bajo el grifo y los mojamos bien. A continuación  introducimos uno en la máquina de helados. Añadimos las moras y seguidamente el otro plátano. Removemos el helado con una cuchara para mezclar bien las frutas, y lo ponemos en una copa.

 Ingredientes (para 2 personas):

2 plátanos maduros congelados
65 g moras silvestres congeladass




¿Os ha gustado este Helado de plátano y moras? Pues acompañadlo de una buena lectura.

Hoy os recomiendo Irene Nemirovsky, El baile. Salamandra Ediciones. Barcelona, 2006.